sábado, octubre 28, 2006

Cine: El Laberinto del Fauno.

Cine: El Laberinto del Fauno: El Laberinto de Guillermo del Toro.

Quiero hablar brevemente de El Laberinto del Fauno, las más reciente película del director mexicano Guillermo del Toro. De inicio, afirmo que es una de las grandes películas del año y de muchos más en cuanto a fantasía se refiere y que se enfila rumbo a los Oscares con muchas esperanzas. Y no es que al director tapatío lo obsesionen los premios, sino que se está acercando cada vez más al justo reconocimiento mundial por su trabajo, y no hay palestra más iluminada que la de la estatuilla dorada.

Asimismo, como en un laberinto concéntrico, Guillermo del Toro se está acercando cada vez más a decir cinematográficamente todo lo que trae dentro, todo el arte que se basa en sus obsesiones infantiles y en la belleza que al menos a mis ojos aparece como despiadadamente mexicana. Ahí esta esa estética de claroscuros y de un barroquismo mexicano que visualmente le da a cada película un ambiente inquietante, ha sabido alimentarse del cómic no sólo estadounidense sino mexicano para crear esas experiencias.

Del Toro consigue en El Laberinto del Fauno la universalidad para sus personajes y la truculencia absoluta del ambiente que por momentos es angustioso pero no desconcierta, has aceptado sus reglas para sentirte sumergido en la historia. Universalidad y espanto crean metáforas realmente bellas y poderosas.

En el tapatío lo visual y lo narrativo son una misma cosa (ese es su laberinto personal), de ahí a que algunas de sus cintas anteriores no logren la redondez en el guión que en El Laberinto del Fauno logra, si bien posee una pequeña falla en el guión.

Pero repito aquí están todas esas obsesiones: Los insectos, cuya estructura mecánica está en Cronos, Mimic y en El Laberinto del Fauno, como mensajeros de la aventura. La maquinaria, sobre todo los engranes, símbolo del devenir, el tiempo, el destino, aquello que es inexorable como en Cronos o Hellboy. La sangre, el símbolo de la vida y la muerte, de la identidad humana y del paso entre dos mundos. La guerra, un incidente que acerca más lo brutal con la inocencia, lo dolorosamente real con el mundo de la fantasía, estos extremos que no antagónicos entablan una lucha y también un diálogo como en El espinazo del diablo. Del mismo modo, los mundos posibles que corren paralelos y se entrecruzan, donde lo real se confunde con lo imaginario y donde los monstruos, no son precisamente las criaturas extrañas que se presentan en la noche.

El Laberinto del Fauno se le ha comparado con Las Crónicas de Narnia pero creo que la primera es más fuerte al ahcer convivir fantasía y crueldad, su mensaje sobre el sacrificio es al mismo tiempo más contundente pero menos enternecedor y he aquí la pequeña falla en la estructura, sin revelar nada diré que, si la protagonista sintiera un poco de odio o rencor por el recién nacido (que pudo haber causado la muerte de su ser más querido) el mensaje del sacrificio hubiera sido mayor.

Para acabar con la comparación creo que el Fauno tiene una presencia ambigua moralmente de ahí su poder en la pantalla, no sabes si es del todo cierto lo que dice, ni a donde lleva a la niña, es un mensajero que pone a prueba a la niña y no un líder como Aslan que le muestra el camino a los niños. La búsqueda y el logro de Ofelia son más heroicos en El Laberinto del Fauno, desde el punto de vista del mito.

Antes de acabar quiero destacar el sonido magnífico, cada personaje posee su lenguaje sonoro, el Fauno como una gran masas de hojas y tierra vieja, ancestral como el monte o el bosque, los insectos hablando en su lengua de telegramas, los militares sonando al rechinido de sus botas de cuero, la rigidez del soldado. Y destaco este rubro porque fue diseñado por una de las grandes leyendas del sonido en México, Martín Hernández.

Reafirmo, El Laberinto del Fauno es una gran película que nos regala a los adultos un cuento de hadas bella y brutalemnte narrado lo cual no le quita nada alcanzando lo sublime.

Guillermo del Toro ha logrado un sello único, una forma personal de mostrar historias en lo literario, lo visual y lo sentimental, que conforman lo cinematográfico; tal como los grandes maestros del cine. Posee sin duda ya estilo, es decir, una honestidad intelectual brutal, es hoy por hoy y mañana uno de los mejores directores de México para el cine mundial.

*

sábado, octubre 21, 2006

Protopoema: Otro.

Poemas: Protopoema: Otro camina.
Otro camina.

Otro camina dibujando estrellas.
La sangre que da como limosna el corazón
es profunda, muda y redonda,
Al fin y al cabo moneda de poco valor
para los ojos que no te miran.

Otro mide la imposible aurora.
El día empieza donde el polvo late
de música o de sagrada fatiga,
de plenitud o inexistencia...
hasta cercenar el tiempo que no sueña.

Otro te ama en crepitaciones de agua.
Es duro seguir terco en la lucha
donde no hay perdón ni misericordia.

Mi reflejo en el mundo
es imperfecto y relativo
para los sueños que me matan
cada noche, cada aurora;
pues sin fortuna,
soy yo y los otros que caminan
y miden,
y te aman.

Desgraciadamente yo sigo siendo yo, siempre:
para entregar la sangre o el alma.

Afortunadamente el día se acaba
y sigo siendo otro y el mismo
que anda por la Tierra.

Otro camina quitando estrellas,
el día te señala
mis manos te desnudan.

Tu sangre también es imperfecta.

elt.

sábado, octubre 07, 2006

Cine: Frases: John Hartigan en Sin City.

Cine: Frases memorables John Hartigan en Sin City (2005).

Siempre me ha parecido que el cine está hecho de su costado izquierdo de frases, discursos, palabras memorables que tañen la eternidad por su perfil más humano.

Sin City abunda en sonidos y por supuesto en imágenes para la posteridad, el arte desplegado está a todo su tamaño y hondura, Frank Miller es un genio y Robert Rodriguez lo secunda.

Creo firmemente que una oración que logre expresar el alma de un ser humano real o ficticio se cincela en la nuestra para cambiar algo dentro de nosotros... y yo quiero traer a este espacio la de un personajazo John Hartigan cuya frase es tan poderosa que aún no logro abarcarla.
And after I pull off that miracle, maybe I'll go punch out God.
(“Y después de realizar este milagro, tal vez vaya a golpear a Dios”)

John Hartigan.