sábado, mayo 27, 2006

Pensamiento: Locura y Dios.

Pensamiento: Locura y Dios.

Cada hombre posee una forma particular de locura tanto como atesora una idea íntima de Dios y quien no las tuviere a mano, no podría llamarse hombre, no sabría cómo gira el mundo, ni sabría dar batalla, ni remanso al espíritu.

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sábado, mayo 20, 2006

Epístolas: Ficción: Querida familia I.

Epístolas: Ficción: Querida familia I. Primera Carta desde “M”.


Querida familia:


Aquí estoy en “M”. Me encuentro alegre y enfermo... Pero sólo a causa de las leyes locales que prohíben tener una salud moderada, hay que optar por una salud óptima o por una deplorable, yo he escogido estar enfermo pues siempre hay esperanzas de mejorar.

Durante el viaje, que fue malo y largo (ahora pienso que hubiera sido mejor salir de la frontera oriental, en vez de dar este periplo), hice varias amistades que con un poco suerte, espero olvidar pronto.

Les cuento que en este país los días son de cuatro horas, pero no se emocionen pensando que por fin podré dormir ochos horas completas, pues estos lapsos duran alrededor de 5 horas con 59 minutos con ajustes diarios de 4 minutos que los pobladores usan para componer algún poema o sinfonía. Les pido me manden aquel reloj descompuesto del abuelo que me será de mucha utilidad antes de encontrar una casa editora de música que quiera publicar mi obra. Por el santoral no se preocupen, aquí usan un calendario de 1976 por demás preciso, sus regalos serán decadentes pero puntuales.

Salvo algunos inconvenientes geográficos que luego les comentaré, “M” y su capital “m” me parecen lugares agradables para vivir. La gente es por demás amable y algo que me gusta de su espíritu es que no puedes decirles en suajili que Mozart es un mediocre, primero por que la sintaxis y la prosodia son imposibles y segundo porque no hablan ni pizca de suajili.

El día es excelente para caminar, me quedaré en casa.

Me despido con cariños y duraznos:

EE.

martes, mayo 16, 2006

Poesía: Protopoema Ensoñación.

Poesía: Protopoema Ensoñación.

Si algún día pudiera soñar contigo soñaría un día efímero de primavera, iluminado en lo profundo, más bien gris y lluvioso pero lleno de música, con cierto aroma de melancolía sobre la maleza negra.

Aaron Copland reinventa la ciudad que espera.

Siempre lloverás [hogaza] sobre la piedra blanca que tallada por el relámpago revoltoso deja entrever [heroica] el vientre resplandeciente de una mujer hermosa [enamorada].

Nadie ha dormido lo necesario para sentirse en otro cuerpo como yo me siento contigo. Me enredas en la tristeza tranviaria de tu alma que está siempre de fiesta y en algún sitio de tu hechura que no ha sido entristecido.

Aaron Copland reinventa la risa que nadie llora.

Si pudieras ver la ciudad bajo el agua mirarías nuestros cuerpos tendidos sobre la cama.

sábado, mayo 13, 2006

Futbol: Filosofía: Algo sobre la Esperanza.

Futbol: Pensamiento: Filosofía: Algo sobre la Esperanza.

Dice Spinoza, “La esperanza es una alegría insegura, que procede de la idea de una cosa futura o pasada, de cuyo acontecimiento dudamos”. Yo le respondería al gran filósofo, sí finalmente es una alegría tal vez triste, o medrosa... pero una alegría.

Y así, la esperanza descansa no en ella misma, sino en el deseo o más bien, en el anhelo de un bien (o un mal) cuya existencia se preserva y perfecciona en el alma, a pesar de las causas adversarias y las circunstancias negativas de aquel ideal que nos ensueña. Refirámonos al bien antes que al mal, pues aunque puede suceder contamina tanto a la esperanza que al final estaríamos hablando de otra cosa.

La fortuita bienvenida del bien en contra de una suerte siempre adversa y de una realidad negativa y frustrante le da, al virtuoso, una fortaleza insólita. Una fuerza precisa, exacta... que le preste vida a la esperanza y que no la mate por certeza ni por imposibilidad. Algunos dirán que esta fuerza es la fe. ¿La fe en qué? En primera instancia, en Dios, pero finalmente en la bondad que representa, volviendo al bien del que hablaba antes.

Pero ¿qué me hace pensar que el bien me sonreirá? Ceo que son dos cosas. Empezaré por la segunda, por la experiencia pasada, si antes ha ocurrido ocurrirá ahora, si ha venido ayer vendrá hoy, si antes a alguien más le ha sonreído, me sonreirá ahora a mí. Vuelvo a preguntar ¿por qué a mí? para llegar a la primera causa que esbozo tal vez con cierta complacencia, porque yo mismo soy creador del bien... y el bien podría volver a mí.
Cierro esta breve y modesta disertación sobre esperanza que me ha inspirado mis amadas Chivas Rayadas del Guadalajara (a las que agradezco y deseo toda suerte de bienaventuranza) con una cita de Octavio Paz “Quien ha visto la Esperanza, no la olvida”.

sábado, mayo 06, 2006

Filosofía: Sobre la Intuición.

Filosofía: Algo más sobre la Intuición.

He pensado últimamente en la intuición filosófica, Bergson dice que ésta puede ser tan precisa como los conocimientos científicos más precisos, todo depende del rigor con que se acepten sus enseñanzas. Y he llegado a la idea que éste rigor y ésta aceptación provienen de cómo se nos da la intuición y qué límites toca.

Ha veces uno es visitado por la Gracia tal como Pablo en el cuento de Arreola y todo parece claro, fácil, evidente, tan a la mano que el contenido es fácilmente asimilable y los límites parecen moverse para ajustarse a lo pensado con complacencia y agrado. No trato de introducir un misticismo sino de reconocer el medio por el cual se captura, se aprehende y se aprende, en suma se intuye un objeto.

Sin la intuición la razón es imposible, pues el “contacto con la mente” de aquello que se piensa es imposible. Razón e intuición se complementan. En medio de la noche de la buena ignorancia y de la sospecha... la intuición guía a la razón en su camino de refinamiento, pero no es un camino plano sino uno que sube y baja, uno que es parecido a una escalinata pues ascendemos en matices.

Por lo tanto, la intuición “ve”ahí donde la razón va a poner un pie, la intuición es sensible pero también, y volviendo al misticismo, es espiritual, en tanto hay metafísica; y es estética en tanto hay simpatía e identificación con lo otro y ya que la estética interior se llama moral, la intuición es ética.

Por tanto, la intuición no sólo es una de las grandes fuerzas filosóficas, sino necesaria para la propia vida.